lunes, 12 de julio de 2010

Factores de riesgo en el noviazgo

Para poder adentrarnos a este tema tenemos que partir de la premisa que un noviazgo es un vínculo afectivo que se establece entre dos personas que sienten cierta atracción por el otro, buscan compartir sentimientos, momentos y caricias con esa persona, como un beso, el tomarse de la mano, un abrazo, tener relaciones sexuales, entre otras cosas y para que exista un noviazgo preferentemente debe existir el enamoramiento, esa sensación de que tienes que estar con esa persona, que cuando lo vez sientes que no te falta nada más, que el mundo es perfecto tal cual, que lo que percibes es una constante de felicidad, claro puesto que dentro de nosotros las endorfinas se vuelven locas, este sentimiento mejor conocido como un estado alterado de conciencia gracias a la euforia que nos provocan los neurotransmisores (dopamina, norepinefrina) y la feniletilamina, entre otros., los cuales son los responsables de esa timidez, el sudor, las palpitaciones, la tartamudez o el mutismo selectivo, etc.

El noviazgo es esa oportunidad que te das para compartir tu mundo interior con el otro, para explorar nuevas experiencias y nuevas emociones, incluso para conocernos mejor, podemos experimentar sentimientos como el amor y el coraje, la ternura, el erotismo y los celos, tolerar y aceptar a alguien que tiene similitudes y diferencias.

Sin embargo este vínculo es el más inestable y frágil que existe, porque no siempre aprendemos cómo tolerar al otro y aceptar las diferencias, nuestras inseguridades se ponen a flor de piel, nuestros miedos aparecen y lo que conocemos como enamoramiento se puede volver nuestro peor enemigo, es por esto, que en ocasiones después del enamoramiento sigue una mutación distorsionada del amor o de lo que creemos que es amor, lo que aprendimos que era, ¿Cuántas veces hemos vivido engañados creyendo que amamos a alguien y lo único que hacemos es estar con alguien a quien no amamos y sólo es costumbre? ¿Por qué existen los celos patológicos en parejas que dicen amarse incontrolablemente? ¿Por qué seguimos agrediéndonos y diciendo al mismo tiempo “Te amo”? ¿Porqué lo que tenemos como ejemplos de amor son canciones con tono depresivo que abordan temas sobre la infelicidad de estar sin el otro y si el otro no está la vida no tiene sentido? Y esto es lo que naturalizamos y de alguna u otra manera entendemos como amor, un amor que se puede tornar agresivo, en donde se descalifica, se devalúa y no se toma en cuenta a la otra persona, no aceptamos que somos seres independientes y creemos que al ser pareja tenemos que pensar como uno mismo, se puede convertir en un juego de defensa y ataque, incluso de violencia no solo psicológica sino física.

Según la OMS cada 15 segundos una mujer es agredida y según datos de la ENDIREH 2006 el 60% de las mujeres encuestadas dijo haber sufrido algún tipo de violencia emocional, 25% se dijo víctima de violencia económica y el 23% acepto haber sufrido violencia física. El ciclo de la violencia es tan marcado en nuestra sociedad y tomando en cuenta que violencia es cualquier acto de agresión sea con el uso de la fuerza o con las palabras, podemos ser agresivos-pasivos y aún así ser violentos, el culpar al otro y responsabilizarlo de nuestros sentimientos, de nuestro enojo, impotencia, coraje, etc., tenemos que romper con este ciclo de violencia y responsabilizarnos de lo que sentimos, pero para lograr esto tenemos primero que aprender a reconocer nuestro enojo, nuestra impotencia, nuestro coraje o el sentimiento que estemos experimentando y ver qué pasa con nuestro cuerpo cuando sentimos eso, reconocernos como enojados o irritables y después de eso poder llegar al diálogo y no culpar al otro por lo que sentimos, no decir “por ti es que estoy así”, “si no hubieras hecho o dicho eso todo estaría tan bien, pero ya ves ya me hiciste enojar”, sino responsabilizarnos y poder decir si es el caso “en este momento me siento enojado por el modo en el que sucedieron las cosas”.

Existen tanto factores de salud como factores de riesgo para el fracaso en la pareja, las parejas son la base de todas las familias, por lo tanto hay que repensar qué tipo de familias queremos tener, ¿Queremos aquellas que aprendan el mismo ciclo de violencia o familias más asertivas?, hay que tomar en cuenta porqué se deciden unir dos personas y si es porque hay un embarazo, si son menores de edad, si alguno de los miembros se casa como medio para resolver problemas con su familia de origen, para olvidarse y alejarse de su familia, si la pareja se forma para superar la pérdida de otra relación, si viven o muy cerca o muy lejos de su familia de origen, si dependen emocional y/o financieramente de sus familias, si han vivido expuestos a modelos conflictivos, si tienen diferente raza, cultura o religión o si su nivel socioeconómico es muy desigual, si es por alguno de estos puntos tenemos que tener cuidado ya que esto debilita la relación sin embargo no es causal ni determinista del fracaso de la relación, lo que sí podemos hacer para fortalecerla es creando parejas no desde la carencia sino desde el auto amor, la ausencia del egoísmo y respeto, la comunicación, la versatilidad y la aceptación de la separatidad, sólo si tenemos estos 5 puntos como mínimo podremos hacer entonces parejas saludables y familias más funcionales.

1 comentario:

  1. me gusto la frase: ...creando parejas no desde la carencia sino desde el auto amor...
    Muy cierto!

    ResponderEliminar